Un cuadro de Pieter Brueghel el Joven, que fue sustraído en 1974 del Museo Nacional de Gdansk en Polonia, ha resurgido en los Países Bajos. Esta pieza, llamada «Mujer llevando brasas», fue reconocida en el Museo de Gouda por el investigador de arte Artur Brand, después de llevar a cabo una pesquisa colaborativa con la publicación de arte Vind.
Información sobre el robo y la recuperación
Detalles del robo y recuperación
En 1974, la pintura fue sustraída del museo polaco y reemplazada por una fotografía. Se sospecha que el robo estuvo vinculado a servicios secretos de Europa del Este, posiblemente en busca de divisas extranjeras. La obra fue rastreada hasta los Países Bajos, donde se encontraba en una colección privada en Venlo. La policía polaca ha solicitado su devolución, y el actual propietario, que la adquirió de buena fe, ha colaborado en su restitución.
El rescate de la pintura ha producido una variedad de respuestas. El investigador Artur Brand, reconocido por sus logros en recuperar piezas artísticas sustraídas, manifestó su complacencia con el descubrimiento. Mientras tanto, la policía polaca sigue investigando para aclarar los pormenores del hurto y asegurar el retorno de la obra a su nación de origen.
La recuperación de la pintura ha generado diversas reacciones. El detective Artur Brand, conocido por sus éxitos en la restitución de obras de arte robadas, expresó su satisfacción por el hallazgo. Por otro lado, la policía polaca continúa con las investigaciones para esclarecer los detalles del robo y garantizar la devolución de la obra a su país de origen.
Este incidente resalta la complejidad de los delitos de arte y la importancia de la colaboración internacional en su resolución. La historia de la pintura de Brueghel el Joven es un recordatorio de cómo las obras de arte pueden ser objeto de disputas geopolíticas y de la necesidad de mecanismos efectivos para su recuperación y restitución.